Graffiti Brasil

Tristan Manco, Lost Art y Caleb Neelon

Editorial: Thames & Hudson
Año: 2005
Idioma: Inglés

SINOPSIS DE LA EDITORIAL

(Traducción de Fernando Figueroa)

Desde los logros tan sorprendentemente característicos de Os Gemeos, pintores gemelos internacionalmente reconocidos, hasta la potencia visual de los omnipresentes y temerarios pichadores, el graffiti de Brasil nos cautiva con ideas, técnicas y mensajes totalmente frescos. Tanto si el gusto de uno tiende a los extraordinarios extremos creativos generados en medio de la privación urbana como si tiende hacia los murales artesanos en su forma más elaborada, Graffiti Brasil nos ofrecerá fotografías que nos impresionarán y una historia y un conocimiento profundos.

Mientras el grafffiti mundial está cada vez más homogeneizado, este libro nos sirve como recordatorio de la fortaleza de la independencia creativa y de los ricos frutos de la diversidad cultural.

OPINIÓN

Este libro nos inicia en la historia del graffiti brasileño, de mano del prolífico Tristan Manco —este será su tercer libro—, el activo Caleb Neelon —este será su primer libro— y Lost Art (Ignacio Aronovich y Louise Chin), quienes aportaron la documentación gráfica. Lo hace con la pretensión de tocar todos los palos, con objeto de mostrarnos la riqueza creativa y de propuestas que acogen los escenarios urbanos brasileños del momento.

A través de sus páginas se da un repaso a la historia de las pintadas política, el pichaçao, la poesía urbana, el bombardeo, los iconos, las plantillas, las piezas de graffiti, el muralismo, el arte urbano en general, legal o ilegal, etc. Manifestaciones que, si bien, se dan en otros países también en concurrencia, aquí las vemos enmarcadas en este contextos particular, con sus matices y peculiaridades. A modo de catálogo, se ofrece además un conjunto de nombres de actores que se han seleccionado a modo de representación de las escenas más importantes de Brasil.

Un libro interesante y ameno para quienes quieran hacerse una idea general de la vitalidad y efervescencia que alberga la creatividad callejera al otro lado del Atlántico, en Sudamérica y en concreto Brasil, a principios de los dosmil y que todavía continúa, siéndonos tan querida y estimulante.